 Entre quejas por parte de los funcionarios de colegio y varias irregularidades en las actas de trabajo, llegaron las maletas con las papeletas a los cuarteles de cómputo de la Junta Central Electoral (JCE) a un conocido hotel de San Juan. A la altura de la media noche no se habían entregado informes sobre las computaciones de votos a la prensa presente el lugar. Entre las irregularidades del proceso se encuentran la llegada de un maletín con el acta de trabajo vacía y un padrón electoral alterado. El mismo corresponde a al colegio número 33 del Coliseo Roberto Clemente. El mismo llegó a cercano a las 10:20pm. Este asunto provocó la movilización de los funcionarios de colegio que trabajaron dicha mesa, para llenar las actas en un proceso que podría dejar varias interrogantes. Otros maletines llegaron con los formularios fuera de los empaques designados por la JCE para el manejo de los mismos. Falta de comunicación por parte de la JCE  Los maletines llegaban literalmente “a cuenta gota”. A la altura de las 10:30pm habían solamente 4 maletines de sobre 40 mesas que componen las 7 unidades electorales en Puerto Rico. La principal queja de los funcionarios sobre el asunto es la falta de comunicación con estos por parte de la JCE en cuanto a la ubicación del centro de cómputos electoral. Un grupo de funcionarios de Canóvanas aseguraron que al no ser informados de la ubicación del comando en el Hotel Double Tree at Hilton de Condado, estuvieron esperando cerca de una hora en las oficinas permanentes de la Junta, anexo al Consulado Dominicano en Santurce. Tanto la prensa, como funcionarios y electores se quejaron en horas de la mañana por la falta de orientación por parte de la Junta Central Electoral sobre el proceso de votación en el extranjero. No fue hasta el día de los comicios, que el organismo gubernamental pautara unos anuncios sobre las elecciones presidenciales y de diputado de ultramar en al menos una emisora del cuadrante FM en la zona de San Juan. Aun así, el anuncio no era orientando sobre el proceso de votación, sino de carácter apelativo para movilizar al elector dominicano a las urnas. A pesar de las irregularidades en el proceso de recibimiento de las maletas y otros conflictos en horas de la mañana, Jazmín Pérez, quien fuera la presidenta una de las mesas electorales de Canóvanas, entiende que el proceso “fluyo tranquilo y todo normal”. En la mañana, la queja mayor era la falta de orientación y capacitación por parte de la JCE. En la noche, Pérez aseguró que hubo “perfecta comunicación” entre la Junta y los funcionarios electorales. A eso de las 11:00pm, empezaron a llegar los maletines de las otras unidades electorales, literalmente “en bonche”. A las 12:00am, todavía no había llegado el maletín de la unidad electoral de Mayagüez. Poca participación fuera de San Juan  Funcionarios de Colegio de Toa Baja y Bayamón afirmaron que la participación en sus unidades fue muy baja, en comparación con lo proyectado en San Juan y Carolina. Igualmente Canóvanas tuvo muy poca participación. A pesar de esto, encargada del proceso en el pueblo de la región este de Puerto Rico destacó la participación de votantes procedentes de la isla de Vieques. Pérez atribuye la baja participación en su región porque muchos de estos dominicanos estaban fuera de Puerto Rico. Neftalí Santana, delegado del Partido de la Liberación Dominicana en la votación de Toa Baja mencionó que hubo poca participación y tensión en su unidad electoral. Aun así, Santana aseguró “la participación fue pacífica y ordenada”. Otros incidentes en las primeras horas de la elección  Entre gritos de euforia y otros de insulto iban llegando los candidatos a diputados de ultramar, al igual que los líderes en la isla de los partidos dominicanos. A las instalaciones del Roberto Clemente llegaron Ricardo Espaillat, del Partido Reformista Social Cristiano y Adelys Olivares del Partido Revolucionario Dominicano (PRD). Esta última ejerció su derecho al voto en el colegio electoral ubicado en Carolina. También estaban apostados en la entrada del Coliseo Romelinda Grullón y Wilfredo Medina, candidatos por la Alianza por la Democracia. Otro candidato que se dio cita al Roberto Clemente fue Levis Suriel, candidato a diputado de ultramar por el oficialista Partido de la Liberación Dominicana (PLD). Todos haciendo campaña a la entrada del colegio electoral. Los funcionarios de las unidades de Bayamón, Canóvanas y Toa Baja aseguraron estos candidatos no llegaron a sus centros de votación. Al parecer decidieron visitar sólo la unidad electoral capitalina, la cual estimaba recibir cerca de 17,000 electores. O sea, un poco más de la mitad del electorado dominicano en la isla en un mismo lugar. Según el padrón electoral de la Junta Central Electoral, 24,335 estaban inscritos para votar en la isla. El “peledista” Levis Suriel votó a las 10:00am en el mismo Coliseo Roberto Clemente. Al momento de entrar, el equipo de seguridad de la JCE no reconoció al candidato, prohibiéndole el paso hasta que no presentara identificación y turno. Tuvo que venir personal de supervisión del proceso a autorizar la entrada del líder del partido morado. Al llegar a la mesa de votación, fue saludado eufóricamente por los funcionarios de mesa, quienes le dieron la papeleta sin explicarle el proceso de votación. Ya en el área de la casilla de votación, los crayones que provee la JCE para el proceso estaban escaseando. Cuando Levis Suriel pasó a votar, le permitió a la prensa que lo vean ejerciendo su voto. En ese momento, personal de supervisión de la JCE amenazó a varios medios y a estudiantes de Comunicación con confiscarle las cámaras, pues el tomar video y fotos de los votantes era ilegal. Este acto de grabar a líderes políticos votando es uso y costumbre en todas las elecciones celebradas en Puerto Rico. La JCE no tenía habilitado en ninguno de los centros electorales de la isla un área para la prensa. La información sobre los procesos electorales dependía de funcionarios de distintos partidos, que en un acto de “buena fe”, referían a los periodistas a los coordinadores y supervisores del evento. Otro de los conflictos del día fue cuando militantes del PRD entraron al pasillo del Coliseo manifestando la consigna “Llegó Papá”, alusiva al candidato presidencial Hipólito Mejía. Estos fueron sacados del recinto, alegando algunos funcionarios del PLD que los “perredistas” estaban influenciando la votación. Esto, recordando que tanto “peledistas” como “perredistas” tenían carnets de identificación con un tamaño significativamente grande como para influir de forma proselitista en los votantes. Mientras se discutía este asunto en uno de los laterales del Coliseo Roberto Clemente, por el otro una compañía cervecera dominicana repartía publicidad sobre su nuevo producto en Puerto Rico. En un aparte con Juan Vázquez, uno de los supervisores de la JCE en el Colegio de Hato Rey, el proceso ha estado “fungiendo muy normal y con mucha gente participando”. Aseguró que todo ha estado dentro del marco de la ley y dentro de los procesos previstos, además de no tener ningún incidente. Cuando se le preguntó sobre los sondeos a pie de urna y la repartición de propaganda privada y pública, este funcionario del organismo rector de los procesos electorales aseguró que fuera del área de votación se puede repartir “lo que sea”. * Escrito por Luis J. Cintrón Gutiérrez para Borinqueya, periódico digital dominicano en Puerto Rico. El artículo lo pueden encontrar en la siguiente dirección: http://borinqueya.net/?p=19384. Otra noticia relacionada con los incidentes en las elecciones dominicanas se encuentra en: http://borinqueya.net/?p=19191. También fue publicado en el periódico universitario Entre Paréntesis.
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Luis Javier
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